PINTADA 29/1

domingo, 18 de julio de 2010

Minificción III

El mundo era pequeño, vacío, en la palma de una mano podría haber cabido en toda su extensidad.

Adán miraba a Eva, con sus ojos que, se deshacían en sueños rotos, en conjeturas que nadaban dentro de un río sin desembocadura, con sus manos temblando; poco a poco sus ojos ya iban tiritando...

Adán, con su garganta hecha un nudo, como nos suele pasar a todos momentos antes de quebrarnos en llantos, le preguntó( luego de que Dios los haya echado del Edén) :
-¿Qué haremos ahora Eva que no nos queda nada, y parece que todo está contra nosotros?.

Más de mil años después, Romeo le estaría preguntando a Julieta( entre tantos otros enamorados ), la misma pregunta.
Los problemas siempre son los mismos, el tiempo se encarga, sutilmente, de cambiar los escenarios y los actores.

No hay comentarios:

Publicar un comentario